Leslie Marcela Balaguer Acero, Actriz y Acróbata Aérea, colombiana con residencia en la región de la Araucanía Chile, integrante del circo Lacustre desde el año 2005.

 

¿Leslie, cómo fueron tus primeros acercamientos al ámbito circense?

LESLIE: En Colombia me formé como actriz, durante este proceso universitario que viví. Surgió un festival en Colombia, un festival de teatro. En la universidad se impartió un taller, en conjunto con la compañía que se presentaría en este festival. Era un taller de tela circense (aéreo), allí surgió este primer encuentro en este ámbito. Actualmente practico números aéreos con tela, para mí fue un amor a primera vista.

¿Tú conocías este ambiente de circo contemporáneo?, uno piensa desde un comienzo, que los artistas tienen un contacto más afín con el circo tradicional o estos formatos. Pero estabas en conocimiento de esta nueva forma circense?

LESLIE: No, no estaba en conocimiento del circo tradicional o formato tradicional que mencionas, pero al ser estudiante y verme inmersa en el mundo del teatro, era mi entorno en ese momento. Pero no conocía estos formatos de circo tradicional o contemporáneo. Al menos no lo tenía presente en ese momento.

A ti como participante de teatro o mejor dicho, artes escénicas, ¿se te produce un nexo de desarrollo a futuro al conocer el circo?

LESLIE: Claro. Es parte de mi proceso con el aéreo (Tela circense). Luego al estar en Chile, desarrollé más la formación circense, siempre mi idea fue mezclar ambas cosas, teatro y circo, eso ha sido parte de mi búsqueda. Luego al seguir mis estudios y tener un acercamiento más concreto, adquiriendo conocimiento, me he dado cuenta que existen similitudes respecto a lo que hacía tanto en nuevo circo o circo contemporáneo.

Luego busqué profesores en Colombia, pero en ese momento se dificultaba aquella información. Aproximadamente esto sucedió en el 2005 – 2006, luego de buscar arduamente información logré conectarme con un profesor. En ese momento era un proceso un tanto paralelo lo que hacía respecto al teatro en ese momento.  Entonces en mi búsqueda encontré un docente y aprendí. Después estuve en Ecuador, y también quise explorar en algún taller. Luego vine a Chile y comencé a aprender lo que era técnicamente el aéreo (tela circense). Ya que estaba la información un poco más a la mano y existían más opciones en comparación de donde yo venía.

¿En Colombia Te topaste quizás con un circuito que llevaba un poco más de desarrollo?

LESLIE: Sí claro, aquí llevaban más desarrollo. Aunque hoy en día en Colombia existe este desarrollo circense y es mucho más asequible respecto a hace algún tiempo.

¿Cuál es tu primer contacto aquí en Chile? respecto al circo. ¿Llegas a estudiar o trabajar en una obra quizás?

LESLIE: Bueno yo llegué a Chile justamente a buscar clases en aéreo (tela circense) y en ese momento creo que existía un espacio en Santiago en el hospital San José. Allí comencé a practicar trapecio con un docente y aprendí técnicas de tela aérea.

¿Por qué captó tu atención esta técnica en particular, o esta especialidad aérea?

LESLIE: Siempre lo que he realizado antes de conocer la tela aérea, existía en mí esta fascinación por las alturas. Creo que es este un gatillar de que buscara este ambiente más circense, entendiendo que para hacer circo hay que saber muchas cosas más aparte, no queda ahí solamente, se debe aprender toda la técnica y procesos, es todo un mundo.

Luego de tu llegada a Chile, en esta búsqueda de perfección en tu arte y especialidad del ambiente circense. ¿Cómo percibes este transcurrir en el tiempo respecto a tu experiencia en Chile?

LESLIE: Llevo un tiempo entrenando y aprendiendo aéreo, de esta forma desarrollándose. Y de pronto surge otro festival parecido al de Colombia pero en Chile, en esa instancia era una convocatoria para participar en una obra de gran formato con una compañía española llamada “Fura dels baus”, allí audicioné y esa fue mi primera experiencia laboral haciendo aéreo. Fue muy interesante pues conocí muchas personas del medio circense

Leslie en esta edición en particular de la revista “saberes de circo”, indagamos la conexión que tiene el circo con las identidades ¿Piensas que existe un nexo, entre la identidad no solo de forma local sino latinoamericana al hacer circo?

LESLIE: Creo que hoy en día puedo referirme a las identidades al hacer circo, ya que he podido viajar por diversos lugares, he vuelto a Colombia y he podido observar el proceso hasta ahora. Al estar aquí en Chile me he podido desarrollar profesionalmente e hice mi vida artística. Pude viajar también a Europa, y pude observar estas diferencias existentes. Creo que culturalmente hay mucha diferencia y pues, esto influye a la hora de hacer circo. Además cada persona tiene su historia, su vivencia, ya sea cultural o política, la genética o las relaciones sociales.

En este proceso que comentas, de volver a Colombia y observar una corriente de circo o un núcleo circense más formado. ¿Cuáles son las principales diferencias que puedes percibir cuando te vas de Colombia y ahora que vuelves y observas este desarrollo?

LESLIE: La diferencia es que existen más espacios. También el hecho de existir una escuela que lleva muchos años enseñando y que permita desarrollar habilidades profesionalmente a los artistas Colombianos. También el circo callejero ha evolucionado enormemente.

¿Ese tipo de circo ya existía entonces en Colombia?

LESLIE: Sí existía pero era muy poco. Eran algunos nada más. Cuando me refiero a circo callejero, me refiero a espacios de aprendizaje. Si no había artistas o grupos que enseñaran circo, no era accesible aprender esta disciplina si uno quería. Ahora hay más grupos y movimientos, el teatro comenzó a reconocer el circo al igual que las instituciones como una disciplina artística. Además técnicamente he visto un avance muy grande respecto a mi ausencia en Colombia hasta ahora.

Luego de este periodo de dedicación constante a aprender de circo, ¿has vuelto a trabajar en teatro?

LESLIE: En algunas ocasiones si, en Villarrica al llegar trabajé con una compañía y reviví esa experiencia que era trabajar solo teatro. Y en las obras que hacemos actualmente, son de circo y teatro. Por lo que continúo haciéndolo.

Sientes entonces que es parte de tu desarrollo artístico circense. ¿Qué lugar ocupa el teatro en tu desarrollo general?

LESLIE: En mi caso es la disciplina que fusiono con el circo para  poder transmitir un mensaje o relatar historias.  Transformando el vocabulario circense de alguna forma. Antes hacía más teatro en la universidad, y con el circo pues surge esta mezcla de ambas disciplinas.

En esta relación que surge del circo contemporáneo, que toma este rol social o este compromiso social del circo contemporáneo respecto a la transformación del territorio. ¿Crees tú que el circo contemporáneo cumple un rol en poder generar espacios u oportunidades, para gente que practica circo? ¿Crees que el circo aporta desde lo social?

LESLIE: pienso que es súper importante en el rol social y en su transformación. Existe de hecho una línea de circo que se enfoca en eso, en desarrollar habilidades sociales en las personas. Es una gran herramienta para aportar en el desarrollo social ya que como disciplina es atractiva a todas las edades. Así podemos transmitir mensajes de un mejor vivir y hasta de confianza o seguridad, el circo te permite desarrollar esas habilidades humanas. Creo que el circo contemporáneo y el tradicional tienen en común la comunidad. Existen códigos, nos ayudamos, cooperamos y eso socialmente da mucho que hablar.

¿Hoy en día sigues desarrollando circo en Chile?

LESLIE: si, me vine a Villarrica hace 8 años. Aquí pude desarrollar un proyecto artístico, como emprendimiento o forma de vida. Ha sido una linda experiencia de hecho ahora somos una compañía una organización

¿Cómo parte este proyecto?, ¿cómo se gesta?

LESLIE: En el 2005 nace “Lacustre”, significa la orilla del lago. Ya que Villarrica está a una orilla del lago y toda la zona lacustre se encuentra allí. Eso significa que hemos desarrollado en esta zona el circo, en este territorio. Con las herramientas que he adquirido con el circo social y el impartir talleres. El tema social a mí me atrae mucho como artista  y  como ser humano, a aportar en lo que hago, me siento llamada a servir a la formación social  aparte del desarrollo profesional en el circo. Esos son los ejes que trabajamos en la compañía, el aporte al desarrollo circense en la región de la Araucanía, el circo social de varias formas; inclusivo, en escuelas, en el barrio; trabajamos creando obras con las temáticas del territorio y hacemos un festival. Todo esto se ha desarrollado en estos 8 años y de manera auto- gestionada, donde tuve que aprender a ser gestora, productora, que es parte de apostar todo por el todo. Tuve que aprender a vender espectáculos o talleres, aprender a hacer proyectos, a cómo funciona burocráticamente o institucionalmente.

¿Te gustaría volver a Colombia a replicar este mismo proceso?

LESLIE: Justamente estoy en ese proceso. Tengo esa proyección de poder volver de a poco, aunque no sé si para vivir. Últimamente voy y estoy pensando en proyectos para poder aportar allá en el ámbito circense. De todas maneras mi vida profesional la desarrollé aquí, allá hay menos posibilidades por el momento, entonces es más difícil volver si uno no tiene algo ya preestablecido o algo a desarrollar. Pero si me gustaría, por eso estoy en ese proceso de ir y volver constantemente.

Si pudieras graficar hoy en día, que parte de tu vida ocupa el circo ¿cómo lo definirías?

LESLIE: Yo pienso que las 24 horas del día, es algo así. Ya que todo gira en torno a nuestra profesión, porque trabajamos administrativamente, toca ir a los lugares por actividades o las funciones, ensayar también. Es sumamente exigente el ser artista circense pues no solo es hacer obra, es estar constantemente entrenando, actualizándose sin parar físicamente, pues mantenerse activo es muy importante en el circo.

Respecto al tema de la validación de espacios de prácticas circenses, ¿ha costado que las instituciones consideren al circo como una actividad continua dentro de la escena artística?, ¿cuesta postular a proyectos?

LESLIE: Nuestra experiencia se basa en dos cosas. Hemos tenido un buen desempeño y una buena relación con los proyectos con el ministerio de la cultura, en el sentido de que no hay tantos pues eso hace que sea posible. Aunque hoy en día cada vez existen más, pero ya hemos desarrollado redes y nos hemos establecido de tal forma que podemos vivir de los proyectos. Hemos podido sembrar y cosechar. Por otra parte, un poco inconforme con el tema burocrático sobre todo con las municipalidades, que al final se relaciona mucho en torno a la política con lo que es la administración de fondos públicos con respecto a la comunidad y su bienestar. No sé si en Santiago, si eso funciona mejor. Aquí en la región fue donde yo aprendí un poco como funciona, entonces me doy cuenta que existe poca información respecto a lo que es hacer cultura y lo que es ser artista, profesional o hacerlo por hobby. Esto ha sido así desde que llegamos, hemos tenido que educar e informar cada vez que nos enfrentamos a estas situaciones. También el hecho de que los directores de los centros culturales no sepan, no tengan o no les exijan conocimientos de gestión cultural de forma mínima, es muy difícil ya que obstaculiza el trabajo y no se puede generar una proyección a causa de esto. Aunque también nos ha servido para fortalecernos nosotros mismos, para hacer nuestro plan de gestión entonces, nos ha servido para desarrollarnos como agentes culturales de forma autónoma entonces así no necesitamos de un municipio para poder vivir de lo que hacemos en este momento. Aunque si nos conectamos con otras comunas y municipios, cada uno funciona mejor que otro por lo mencionado anteriormente. Todo esto ha permitido que nos desarrollemos más acorde a nuestras necesidades, ya que es algo complejo mezclar política con lo cultural.

¿Cómo sientes que ha sido este desarrollo de tantos años en Villarrica, crees que ha impactado en esta comunidad en particular la llegada del circo y sus proyectos, y como esto también influye en ti y tu desarrollo personal?

LESLIE: Cuando llegamos comenzamos impartiendo talleres municipales, de allí se creó un grupo juvenil. De igual forma con un centro cultural, la administración de ese momento hicimos un proyecto de formación. Siento que cuando uno llega a un lugar con deseos de aportar, tiene que identificar las necesidades. Una de las primeras que identificamos es la formación permanente profesional, que existan espacios  donde uno pueda entrenar, tener docentes que te guíen para aprender. De esta misma forma nosotros queríamos tener un espacio para formarse y profesionalizarse. Por eso comenzamos los proyectos de formación y sucesivamente todos los trabajos han sido por las necesidades que hemos sentido y visto. Entonces aparte de poder beneficiarnos como compañía, nos hemos abierto a las necesidades de la región, ya que era necesario formar lazos para poder desarrollarnos y así continuar creciendo y generar instancias más formales para que se de este desarrollo. Siento que hemos creado este grupo juvenil, y al ser constantes de una u otra forma, con o sin proyectos. Existe un grupo de jóvenes desde esa época, nos hemos aliado con personas de Temuco, ahora se abre Curarrehue, entonces se van abriendo focos donde empiezan a querer desarrollar el circo de forma profesional para ir creciendo.

Me imagino que este grupo juvenil que ha vivido toda esta experiencia ya son capaces de replicar todos estos procesos y ser parte  de este proceso creando su propia comunidad.

LESLIE: Claro, es esa la idea. En este momento ellos están en un proceso de “laboratorio de creación”, este año fueron seminarios técnicos. Siento que es importante que antes de enseñar de modo profesional o formal, se debe brindar herramientas pedagógicas, ese es un área que deseamos reforzar. A veces hay artistas que no son muy buenos profesores y que no tienen pedagogía y esto es súper importante al momento de transmitir. En esta disciplina trabajamos con esfuerzo físico, entonces si no estás bien instruido puedes lesionarte o pueden ocurrir accidentes mucho peores.

Sé que lo mencionamos hace poco, respecto a los planes de volver a Colombia, pero haciendo proyección tanto personal como profesional, ¿cuál es tu visión de aquí a futuro, de tu carrera?

LESLIE: Yo creo que este es un camino que comenzó, y que toma forma al igual que crece con el tiempo. De igual manera va adquiriendo otras necesidades. Yo tengo una visión a futuro respecto a mi desarrollo, y además estamos en una etapa donde no solo nos proyectamos regionalmente sino nacional e internacionalmente, con ayuda de las redes o de intercambios. Seguiremos propulsando actividades, proyectos e ideas que sentimos nos sirven a todos y todas, estamos formando un gran equipo. Ojalá que cada vez sea mejor hasta llegar a ser una red de circo del sur por ejemplo, esa es una de las proyecciones, sin apuros y con tranquilidad. Sin saber hasta cuándo o dónde pues es difícil adelantarse tanto en el futuro.

¿Te gustaría seguir desarrollando los dos frentes entonces, tanto lo formativo como en tu disciplina?

LESLIE: En mi caso, yo sigo entrenando cada día y creo que lo seguiré haciendo pues creo que como artista circense hay que hacerlo, para estar activo en la escena. Además en el circo uno siempre evoluciona, siempre hay peldaños que subir que ayudan a formarse, es interminable. Yo creo que en ese sentido, lo seguiré haciendo, pero tengo siempre mi dualidad entre la gestión, la producción y la parte artística. El ser gestora artista, es mucho trabajo ya que hay que entrenar, actuar, está también la producción y ser mamá que no es menor. Yo creo que estoy en ese proceso, que si crece el equipo uno puede delegar ciertas responsabilidades a otro para aliviar la carga laboral. En este momento quiero seguir desarrollándome como artista y gestionando lo que hago, entonces una cosa me lleva a la otra se vinculan. No sé si en un futuro solo me dedique a ser gestora o productora,  por ahora me encuentro en los dos frentes.

Quisiera agregar que la compañía lacustre no soy solo yo, sino que está también Javier Pinto, padre de mi hijo. Es un proyecto familiar desde el comienzo. Además otros integrantes de Villarrica como Javier Fernández, es el músico con quien hemos trabajado, Martin Erdmann, Malabarista Villarrica, Rodrigo Vivallo, Acróbata aéreo Coñaripe, Claudio Anzorena, Actor y Acrobata aereo Curarrehue, Juan Pablo Bernal, Malabarista Pucon, Felipe Mansilla, Audiovisual Temuco, Felipe Atenas, Diseñador Francia, Lucia Ferreira, Contadora Villarrica,Viviana Ferrer, Periodista Villarrica, Diego Colpy, Técnico digital, Community Manager Osorno, Marcela Urzay, Producción en terreno Pucon, Viviana Valenzuela, Técnica de Luces Pucón.

Por: Jorge Gómez