Con la misión de recolector de imágenes que mi rol de fotógrafo me ofrece me dirijo hasta el Teatro la Cúpula del Parque O’Higgins, hace mucho que no me tocaba visitar el parque y al ingresar el fresco viento producido por la vegetación a mi alrededor  me aleja de mi cotidiana realidad de asfalto y calor, mientras camino por un largo pasillo rodeado de árboles observo gente practicando circo en los prados, inmediatamente recuerdo todas las historias que me han relatado o he escuchado sobre del Parque Forestal y el inicio de lo que hoy conocemos como circo contemporáneo. El encuentro parece cerca, después de unos minutos llego a mi destino, el Teatro la Cúpula del Parque O’Higgins , el equipo técnicos y humano de El Circo del Mundo – Chile detalles para el inicio, los artista impacientes repasan sus rutinas, en la otra vereda del escenario a medida que los asistentes llegan el teatro se transforma en un gigantesco ruedo, se acerca la hora,  el sonido de la música pareciese presagiar el inicio, la familia se acomoda, las luces viajan por todas partes danzando como expertos trapecistas, el inicio del  2do Festival Internacional de Circo ¡está comenzando!

Alain Veileux, maestro ceremonia de la cita da el inicio, los artistas de diferentes sectores del continente están listos para comenzar con la historia, en la primera reunión se presentara de Circo en la Cuerda (Chile) con la obra “Abuelo”, donde las técnicas de circo están al servicio de la puesta en escena y la acrobacia, para relatarnos un historia de abandono, tristeza y melancolía, pero también de acompañamiento mutuo, Salo el Payaso con una presentación hilarante y el Circo Crescer e Viver (Brasil) con un show cargado de color y acrobacias. Después de casi 3 horas es hora de ir a descansar y guardar energías para la segunda cita.

Es el turno de la segunda jornada del festival, desde muy temprano diferentes talleres y conversatorios son la antesala de lo que sucederá apenas llegue la tarde, la teoría y el conocimiento quedan a disposición de los asistentes y practicantes de circo que acuden a la invitación, yo me dirijo con ánimos renovados y ansiedad por un nuevo día de espectáculos, en el teatro el ambiente va creciendo mediantes los asistentes van ingresando, aprovecho de buscar una ubicación cercana para no dejar escapar ningún detalle. Los primeros en presentarse son el Circo Cuarta Estación (Chile) con la obra “Las Parcas de Chapilca”, montaje de circo contemporáneo que relata el devenir de tres generaciones de tejedoras de la localidad de Chapilca, valle del Elqui conectadas en el tiempo, a través de su ofi­cio el tejido a telar de la lana de oveja, los segundos en presentarse son los invitados Tallarín con Banana, donde  El dúo entrega una fórmula clásica y certera de proporcionar risas, relato de circunstancias que los enfrenta y los alianza, creando situaciones que implican al espectador. En el cierre de jornada Circo la Tarumba, colectivo 2121 (Perú) presenta un espectáculo con un mensaje histórico, político y social, un propuesta de circo contemporáneo radiográfico  mediante el circo del Perú.

Tercera Jornada, llego un poco antes del inicio, aprovecho de mezclarme para buscar una buena ubicación, es hora del espectáculo, en el show inicial Circo para todos de (Colombia)  quienes forman parte de la Federación Iberoamericana de Circo – FIC, formada en el 2012, creada para potenciar este tipo de eventos e intercambio, los colombianos derrochan virtuosismo y entrega en escena, acrobacias y equilibrio acompañado de ejecuciones perfectas de cada truco en escena. Para continuar el invitado Pablo Potocnjak, El Señor de los Trompos, juego de tradición popular que pertenece al patrimonio intangible de muchas culturas, y que se incorporó hace ya varios años a los circos tradicionales de américa latina. Y en el cierre Circo Balances con la obra “Wolf” el espectáculo fusiona de forma delicada y con mucho virtuosismo acrobacias en el aire y movimientos acrobáticos que invaden todo el escenario en una presentación de mucha intensidad que propone la conexión con el estado más natural y puro que en cada uno radica.

Hoy es el gran final, como buena despedida desde muy tempano los técnicos y artistas preparan la última pieza del festival, el maestro de ceremonias está preparado ¡comienza la función! Las artistas invitadas Soraya Sepúlveda y Maite Alday salen a escena para compartir sus propuestas circenses, con códigos que navegan por el teatro y el circo contemporáneo. Para el gran final El Circo del mundo – Chile trae la obra La voz de los 80, la obra es una invitación a la memoria, una revisión de imágenes y movimientos de la agitada década de los 80, un paseo por un Chile herido producto del manto de la dictadura. Acompañado de la música de Los Prisioneros el relato en movimiento que nos sorprende con grandes acrobacias, nos sitúa en una sociedad que comienza a perder el miedo, apostando por la esperanzadora construcción de un país libre y democrático. La  representación que los artistas logran en escena convierte la obra en una visita histórica colectiva mediante los códigos del circo contemporáneo.

Después de cuatro días cargados de emociones, reflexiones, risas y aprendizajes el 2do Festival Internacional de Circo dice adiós, no sin antes extender la promesa de volver a sorprendernos y maravillarnos en su próxima visita.

Por: Jorge Gómez E.